Luego de deliberaciones entre jefes de Gobierno de los países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), durante la VII Cumbre del bloque regional, celebrada en octubre pasado, se concretó que el 1º de enero entrara en vigencia el Sistema Unitario de Compensación Regional de Pago (Sucre).
Esta iniciativa es el primer paso hacia una moneda común que ahorrará a los países del Alba la compra de dólares para pagar sus importaciones entre las naciones de la alianza y tendrá su primera experiencia de implementación con la exportación de arroz venezolano a Cuba, a comienzo de este año, esto servirá de ejemplo para que todas las naciones miembro se articulen al intercambio que espera, a mediano plazo, desplazar al dólar como divisa para operaciones comerciales en la región.
El Sucre estará integrado por el Consejo Monetario Regional, la Unidad de Cuenta Común Sucre, la Cámara Central de Compensación y el Fondo de Reservas y Convergencia Comercial, y constituirá un mecanismo de pago más expedito que el dólar, moneda que normalmente tarda entre tres o cuatro meses para hacerse efectiva después de concretada la venta.
El sucre será una Unidad de Cuenta Común (UCC), como lo fue los inicios el euro, y su valor dependerá de una canasta de monedas. Esta canasta estará conformada por monedas locales de los países del Alba (el boliviano de Bolivia, el peso cubano de Cuba, el dólar del Caribe Oriental de Dominica, el lempira de Honduras, el córdoba de Nicaragua, el dólar de Ecuador y el bolívar de Venezuela) y es la que determinará el valor de la UCC.
La participación de cada moneda en la conformación de la canasta corresponderá al peso relativo de cada economía de estos países internacionalmente. Para esto deben determinarse las variables para establecer la ponderación o peso relativo de la participación de las monedas locales en la canasta.
La definición de esta cesta de monedas permitirá, en un segundo momento, poder avanzar en el proceso de integración monetaria mediante la creación de lo que ya sí será una auténtica moneda regional con emisión física.
También deberá establecerse la convertibilidad del Sucre con otras divisas.
Fuente: ABN